Doctorado en Educación

Escuela de Educación

La Tesis

Los criterios en los que se basa el diseño del Doctorado son congruentes con los que se han encontrado de mayor peso para combatir el sindrome de “todo menos la tesis” (en inglés ABD –all but dissertation-), como han dado en llamar al fenómeno de la deserción de los posgrados antes de la terminación de la tesis los estudiosos del tema de la eficiencia de los programas de posgrado, en especial, de los doctorales. La eficiencia de los programas -altas tasas de graduación y tiempo reglamentario para la realización de la tesis-, además de guardar una relación estrecha con la disponibilidad de becas que paguen el tiempo de estudio de los doctorandos como un trabajo, ha probado estar fuertemente asociado con cuatro factores: 1. la calidad de la tutoría recibida de parte del director de tesis (alguien que se interese por su trabajo); 2. que los programas enfaticen la importancia de completar la graduación en un tiempo razonable y limitado; 3. que las reglas y los calendarios de fechas relativas al completamiento de la graduación sean claras y explícitas; y 4. que se promueva que los estudiantes publiquen avances de sus tesis durante la cursada del Doctorado. Todos estos factores que requieren una cultura institucional compartida (entre los miembros de los órganos directivos, la dirección, los docentes, los directores de tesis y los jurados de tesis) y la voluntad y el compromiso de sostenerlas en el tiempo son los que impregnan el Doctorado en Educación.

Acerca de la producción de la tesis

La tesis, instancia central del Programa de Doctorado, se inicia desde el primer momento de la cursada, especialmente en el ámbito del Taller de Tesis I. Se promueve que haga un aporte significativo al conocimiento en el campo de la Educación, sólidamente fundado teórica y metodológicamente, sobre temas pertinentes, con una fuerte preocupación por la ulterior utilidad de sus resultados para el mejoramiento del sistema educativo.

Se pone énfasis en la creación de una comunidad de práctica con la sólida convicción de que se aprende el “oficio de investigador” junto al maestro, a la manera del gremio medieval, en un taller de aprendices. Este clima se intenta recrear en el Taller de Tesis que se desarrolla en forma grupal durante los tres años de la cursada, quincenalmente los dos primeros y mensualmente el tercero. El Taller está coordinado por un docente investigador con larga experiencia en este tipo de talleres. Todos los asistentes participan de los avances de la tarea de todos los asistentes con comentarios, discusiones y reflexiones. Al cabo del primer semestre de cursada, los doctorandos habrán seleccionado su director de tesis (en consulta con la Dirección, el Comité Académico y quien coordine el Taller). En esa selección se toma en cuenta el conocimiento experto en la temática de la tesis, la producción de conocimiento publicado, la experiencia en dirección de tesis, la vocación por formar investigadores, y el compromiso de trabajar sostenida y sistemáticamente con el tesista. A partir de ese momento y hasta el final de la tesis, el trabajo del director de tesis y el del director del taller van juntos. La comunicación entre ambos es fluida a lo largo de todo el proceso y conducente a promover el avance del trabajo del tesista.

El Taller I concluye con la elaboración de la prepropuesta de tesis, ayudada y promovida por un conjunto de guías de trabajo que progresivamente van llevando a los tesistas desde la selección del problema y los objetivos preliminares, a la elaboración del estado del arte y elección preliminar del marco teórico, al diseño de la investigación, la selección de las fuentes de datos y el tipo de técnicas de recolección de datos y el diseño preliminar del análisis. Estas guías -que pueden consultarse en el Programa del Seminario de producción de tesis y de formación en la actividad académica (http://www.udesa.edu.ar/Posgrados/Programas-de-Posgrado/Doc-en-Educacion/Posgrado-por-Dentro/Plan-de-Estudio)- establecen requisitos de longitud, diagramación y fechas de entrega y de discusión grupal. Se pone énfasis en lograr una estrecha articulación entre el marco teórico, los objetivos y el diseño de la investigación. En el proceso, los doctorandos presentan avances por escrito que circulan electrónicamente con sus compañeros, y que se discuten en cada encuentro. En el período de desarrollo del Taller I, se introduce el Módulo de Redacción Académica I en el cual se trabaja sobre el género “Tesis” y se avanza en el desarrollo de la tesis mediante estrategias pedagógicas como la elaboración del abstract preliminar de la tesis.

Tras la aceptación de la prepropuesta en el ámbito del Taller I, el aval del director de tesis y el acuerdo de la dirección del programa, se constituye el comité de Defensa de la Propuesta formada por dos expertos. En aras de favorecer el desarrollo de la tesis, desde 2007 se modificó la instancia antes denominada “Examen de Calificación” por la de “Defensa de la Propuesta de la Tesis”. El cambio buscó transformar una situación de examen-evaluación en una de intercambio y discusión entre el doctorando y el Comité de Expertos. Dicho intercambio, que le provee al primero una oportunidad para discutir su Proyecto y recibir sugerencias por parte de lectores externos le posibilita ajustar y/o reestructurar su Propuesta de investigación en una etapa temprana de su desarrollo. Se trata de abrir a los tesistas la oportunidad de beneficiarse de sugerencias para la redefinición de objetivos, enriquecer el marco teórico, el estado del arte o antecedentes de investigación, de fuentes de datos, de técnicas y estrategias metodológicas convenientes, de áreas de vacancia que valdría la pena abordar, etc., todo esto antes de iniciar el desarrollo de sus tesis. Esta modificación está en línea con la idea de transformar situaciones de evaluación en situaciones de aprendizaje y de abundar en la adopción de la pauta de discusión de las ideas como herramienta de socialización académica. El cambio del objetivo de este evento requiere lograr un cambio de una cultura basada en evaluaciones (que pone énfasis en el castigo o premio de los evaluadores a los evaluados) a otra de construcción colectiva del conocimiento (que acentúa la curiosidad) de parte de todos los actores involucrados.

Todos los expertos tienen título académico máximo de Doctor o muy extensa trayectoria reconocida. Entre ellos, Alicia Camilloni, Patricia Sadovsky, Elvira Arnoux, Mónica Pini, Angel Centeno, Osvaldo Barsky, Gustavo Dufour, Juan Carlos Del Bello, Flavia Terigi, Ana María García de Fanelli, Ángel Centeno. Las modificaciones sugeridas por los expertos dan lugar a la reelaboración de la propuesta que sigue desarrollándose en el Taller de Tesis II.

La mecánica del Taller de Tesis II es similar a la del I, con la diferencia del nivel de avance de la investigación de tesis. También en este caso, se introduce el Módulo de Redacción Académica II en el que se trabaja sobre la redacción de ponencias y/o artículos para difundir avances de la tesis en ámbitos académicos.

El Taller III concluye con un estado muy avanzado de la tesis, utilizando las mismas estrategias pedagógicas de la comunidad de práctica ya mencionadas, con estrecho contacto entre los doctorandos que forman una red de sostén intelectual y emocional, fundamental en este proceso de creación que es la actividad de investigación y de creación de conocimiento. (Para mayor información, ver programas del Taller de Tesis I,II y III y de los Módulos de Socialización Académica).

Los directores y co-directores de tesis cuentan con extensos antecedentes en investigación, dirección de tesis y formación de investigadores. Su procedencia institucional es variada.

Los directores y codirectores de tesis son seleccionados por la dirección de la Carrera en conjunto con el Comité Coordinador, tomando en cuenta la temática de la investigación propuesta por el alumno. La Dirección de la Carrera mantiene un seguimiento muy cercano de la tarea de los directores de tesis, para asegurar un apoyo constante a los alumnos en el proceso de realización de su trabajo de tesis. Son directores y co-tutores de tesis habituales el Lic. Juan Carlos del Bello, y las y los doctores Ana María García de Fanelli, Mariano Palamidessi, Antonio Camou, Silvina Gvirtz, Inés Dussel, Mariano Narodowsky, Jason Beech, Mercedes Di Virgilio, Catalina Wainerman.

La composición del jurado contiene miembros internos y externos al programa y, en varios casos de universidades y centros de investigación extranjeras (Francia, Israel, México, Chile, Reino Unido). La defensa, que es pública, tiene lugar después de la evaluación independiente de los tres jurados haya sido positiva.